Qué hacer 3 días en Menorca para volver nuevo

Tres días en Menorca dan para resetear y mucho más. Solo tienes que organizar bien tu escapada para no perder tu preciado tiempo allí. Ya sabes: la planificación del presente es el éxito del mañana.

Menorca es ese destino megacodiciado por todo quisqui; celebrities varias, políticos y cualquier viajero que se precie quieren estar allí. 

Y tú no vas a ser menos, claro.

Reserva de la biosfera desde 1993, tiene una fauna y flora autóctonas que viven en sus parajes paradisíacos cuidados por las autoridades y los menorquines como la joya que son; por eso conserva todavía ese puntito silvestre que la hace tan especial.

Te proponemos tres días en Menorca en los que puedas hacerte una idea de qué ofrece esta isla balear tan especial.

Vamos, que nos vamos.

Lo mejor de Menorca en 3 días

Empecemos por decir que para aprovechar al máximo tus vacaciones de tres días en Menorca, alquilar un coche es lo mejor; no dependes de horarios y puedes llevar contigo los bártulos de playa, que te van a hacer falta.

Para ubicarte solo tienes que saber que las dos ciudades más importantes son Mahón en la zona sur y capital de la isla y Ciutadella, en la parte norte.

Elige alojamiento como cuartel general cerca de una de ellas y… ¡a jugar!

Para no morir en el intento, te sugerimos que combines playa y cultura, que el mar cansa mucho y puedes acabar más rojo que el culo de un mandril.

Lo mejor es que las mañanas las dediques a ir de calas y las tardes y las noches a visitar sus ciudades más populares y a hincarle el diente a alguna de sus delicias gastronómicas.

Empezamos nuestra lista de lugares que visitar en tres días en Menorca.

Playas y calas del sur

El sur de Menorca nos regala tanto playas con arenales increíbles como calas de aguas cristalinas con miles de tonos de azul, en las que hacer snorkel es un must.

Nuestro consejo es que madrugues para no encontrar tanta gente y, sobre todo, flipar con la luz a todas las horas del día e ir viendo cómo cambia el color del agua.

En el sur no te puedes perder Cala Macarella y Cala Macarelleta. Dedícales toda una mañana que bien merecen la pena.

Cala Macarella es una de las más famosas de la isla y es simplemente preciosa, el ejemplo por antonomasia de cala virgen menorquina: arena blanca y aguas cristalinas rodeadas de acantilados con los típicos pinos que llegan hasta la playa.

Ojo, que más de uno se ha encontrado con alguna cabra; no son agresivas pero si eres muy urbanita podría darte un parraque.

Desde allí ve andando hasta cala Macarelleta, más recoleta y tranquila.

Pero no te dejes influenciar por su nombre en diminutivo porque es brutal. Nos atreveríamos a decir que casi vale más la pena que su hermana mayor a pesar de ser más pequeña porque es silvestre total y el agua transparente al cien por cien.

Atención aquí porque si vas de junio a septiembre no podrás hacerlo en coche; tendrá que ser en bus urbano o en una excursión organizada.

Por la tarde te recomendamos que te dirijas a cala en Turqueta, otra de las que no puedes dejar de visitar en tu viaje de tres días a Menorca.

Por su nombre adivinarás que sus aguas son muuuuyyyyyy azul turquesa y lo bueno es que tienes tanto arena como roca, por si te va más lo del buceo. 

La playa de arena fina está rodeada de pinares y de acantilados calcáreos no muy altos desde los que puedes saltar… ¡Mediterráneo puro!

Ojo, huelga decir que los escarpines en este viaje sí son imprescindibles; y si tienes unas zapas de trekking de esas que son con agujeros y pensadas para mojarse, mejor todavía. Son feísimas y lo sabemos, pero luego lo agradecerás.

Playas y calas del norte

Las playas de la costa norte de Menorca son muy diferentes de sus hermanas del sur. Parece mentira que sean parte de la misma isla. 

El despiadado viento de tramontana y el tiempo han esculpido las formaciones rocosas que ves y las arenas rojizas de sus playas.

Cala Pregonda es una cala diferente y por eso es considerada una de las más bonitas de Menorca. 

Una de las ventajas de esta cala de arena rojiza es que, a pesar de su belleza, no está tan frecuentada como las del sur y te puedes permitir disfrutar de ella con más tranquilidad.

Algo muy chulo es que frente a su orilla hay dos islotes, Illot y Esculls de Pregonda, hasta los que puedes llegar nadando para disfrutar de las vistas del litoral y su sistema dunar.

Lo natural después es ir a la platja de Cavalleria, también de arena arcillosa; allí verás que mucha gente se embadurna el cuerpo entero porque es muy buena para la piel; no es que vayas a volver irreconocible, pero entre el baño de arena y el de sol serás la envidia de tu gente al volver de vacaciones.

Atención a las vistas desde lo alto de las escaleras que bajan a la playa… el paisaje es impresionante.

Mahón

Si en tu viaje de tres días en Menorca decides darle una tregua a tu piel por el sol, Mahón es una de las ciudades que tienes que ver y aprovechar para probar delicias menorquinas como su famosa sobrasada o zamparte una caldereta de langosta.

Es la capital administrativa de la isla y se puede patear tranquilamente en una tarde con su noche para disfrutar de una buena cena y rematar con una pomada, combinado de Gin Xoriguer y limonada al estilo menorquín.

En tu recorrido por la capital no puedes dejar de pasarte por la Fortaleza de la Mola, en la misma bocana del puerto; el Ayuntamiento, el Bastión de Sant Roc y la Iglesia de Santa María, con su órgano del S.XIX de 4 teclados y 3.120 tubos.

Ciutadella de Menorca

Otra muy buena opción para tener un poco de todo en tu viaje por tierras menorquinas es dedicarle al menos unas horas a la segunda urbe más importante de la isla.

Ciutadella tiene mucho encanto; su casco antiguo bien merece un paseo que es buenrollismo puro y duro.

Recorre desde el puerto hasta el Castillo de San Nicolás haciendo alguna parada técnica para tomar una cerveza o un vermut en la Plaza del Borne o en la de Ses Voltes y hacer hambre.

Vuelve al puerto y date el gustazo de tomar un buen pescado, que de bocatas ya has tenido bastante en las calas.

Y si vas en verano, quizás puedas presenciar la rissaga en acción; es un fenómeno natural que se da en el puerto de Ciutadella de Menorca que hace que el nivel del mar suba y baje considerablemente muy rápido y en cuestión de minutos puedes ver cómo los hacen los barcos. Muy curioso.

Y aquí terminamos nuestra lista de cosas que hacer y ver en Menorca en tres días, no sin antes recomendarte que te hagas con un cuaderno para ir tomando nota de tus aventuras para que no se te olviden jamás de los jamases.

¡Buen viaje!