Cuba en 10 días: los imperdibles

Creer que vas a conocer Cuba en 10 días es como decir que se puede poner puertas al campo. Que no se puede, vamos.

Por eso es muy importante que selecciones bien dónde ir y cómo. Si planificas de manera inteligente, estarás más tiempo viviendo este seductor país y menos buscando.

Cuba es un lugar que tiene mucho que ver y sobre todo infinidad de emociones que sentir. Allí todo es descomunal: su historia, cultura y naturaleza te atrapan.

Para que tengas una ayudita, hemos seleccionado los lugares que te harán entender por qué viajar a la República de Cuba es algo que hay que hacer una vez en la vida al menos, mi amol.

Los 6 lugares que hay que ver en Cuba en 10 días

Antes de entrar en harina, te daremos un consejo: prepárate para vivir algo único. Viajar a Cuba es una especie de regreso a un pasado que se puede ver, oler, escuchar y tocar.

Vamos a por ello.

#1 La Habana

Empezamos por la capital, porque no se entiende un viaje a Cuba en 10 días ni en 100 que no pase por aquí. Es más, si tuvieras que escoger un solo punto de la isla caribeña, debería ser este.

Eso sí, haz lo que sea para dedicarle al menos 48 horas y disfrutarla como se merece.

Coge aire y ponte calzado cómodo porque los vas a necesitar para recorrer sus calles empedradas y para bailar cada 100 metros. Todo en La Habana tiene música, TO-DO.

Para el día, empieza por darte un paseo por La Habana Vieja, patea el barrio del Vedado y la Plaza de La Revolución. 

Su Capitolio también es digno de ver porque, ironías de la historia, recuerda mucho al de EE. UU. en Washington.

Si te cuadra, déjate el Malecón para el atardecer: se llena de gente bailando, cantando y charlando. Es un buen plan para prepararte para la noche con más sabor que hayas vivido jamás.

Son las 21:00h y suena el cañonazo que antes avisaba del cierre de la bahía a los barcos y ahora marca el pistoletazo de salida para la noche habanera. 

Los must de la noche en La Habana son tomar un mojito en el “Bodeguita del Medio”, cenar en un restaurante típico cubano y luego tomar un daiquiri en el famoso Floridita. 

Y si te queda cuerpo para más, métete en un cabaret como el Tropicana o en uno de sus muchos garitos con música en directo.

#2 Varadero

Después de la bomba de sensaciones que es La Habana, ir a Varadero te va a venir de perlas. Está a un par de horas en coche de la capital hacia el este.

Todo lo que digamos de Varadero se queda corto con la sensación de aterrizar en sus playas de arena blanca y aguas más que cristalinas.

Su fama de paraíso en el que tirarse a la bartola y dejar que alguien te vaya rellenando el mojito es muy merecida. Si lo tuyo es tostarte al sol, en Varadero lo gosarás.

Aprovecha para regalarte una noche en un resort a los que tienes que ir una vez en la vida por lo menos.

Varadero es parte de la provincia de Matanzas. Su capital, del mismo nombre, tiene un saborcillo decadente pero muy bonito gracias a sus edificios coloniales.

#3 Viñales

En tu viaje a Cuba en 10 días tienes que incluir una visita al Parque Nacional de Viñales, al este de la isla en la provincia de Pinar del Río. Cálzate bien las botas que te vas de senderismo.

En Viñales están los famosos mogotes, unos enormes bloques de piedra caliza rodeados de exuberante vegetación.

Viñales tiene un interesante sistema de cuevas que bien vale la pena. Si tienes oportunidad, adéntrate en la Cueva del Indio en una barquita y empápate del exotismo de la vegetación de su valle.

Cerquita de Viñales, en Pinar del Río ciudad y alrededores podrás visitar las plantaciones de tabaco y aprender cómo se hacen sus célebres cigarros. ¿O es que pensabas marcharte de cuba sin sentir el aroma de los puros?

#4 Cayo Coco y Cayo Guillermo

Ojito con la definición de cayo porque solo con leerla tu imaginación vuela. Un cayo es una isla generalmente pequeña, con una playa de baja profundidad y formada en la superficie de un arrecife de coral.

¡Boom! 

Quieres estar allí ahora, ¿verdad?

En nuestro periplo de diez días por tierras cubanas te aconsejamos que visites Cayo Coco, al norte de la isla y uno de los más populares de Cuba.

Hunde los pies en las claras arenas de algunas de sus playas y bucea en sus aguas cristalinas. En Cayo Coco no es raro ver aves zancudas en su hábitat como flamencos rosados o garzas reales.

Lo mejor que puedes hacer en este cayo es explorarlo a tu libre albedrío. Dos de las playas que deberías visitar en tu conquista de la isla son Playa Las Coloradas y Playa Flamencos.

Si decides quedarte un par de días o tres, tienes muy cerca Cayo Guillermo. También impresionante, aunque más tranquilo.

#5 Trinidad

Trinidad es sobre todo un viaje en el tiempo porque es la ciudad mejor conservada de la República de Cuba. Parece haberse parado en algún punto de su pasado colonial.

Para entender el esplendor de esta urbe hay que saber que durante los siglos XVIII y XIX la producción de azúcar la convirtió en una ciudad muy próspera, de ahí la cantidad de palacetes que se pueden ver.

Un paseo por su casco antiguo, Patrimonio de la Humanidad, con sus calles empedradas y fachadas de colores, te traslada al mismo siglo XVIII.

En los alrededores de la ciudad podemos ver plantaciones de azúcar y cómo vivían los esclavos. Ya sabes, la triste cara B de la prosperidad que comentábamos.

#6 Santiago

Llegamos a la sexta recomendación de este periplo cubano de 10 días. Llegar a Santiago desde Trinidad te tomará tu tiempo, pero no te arrepentirás. El solo hecho de perderte por sus calles ya vale la pena.

Santiago es un lugar que tiene mucha importancia en la historia de la revolución

En ella puedes visitar el Cuartel de Moncada, considerado el germen de la revolución; el ayuntamiento, desde cuyo balcón Fidel Castro proclamó la victoria y la tumba del dictador en el cementerio de Santa Ifigenia.

Si Santiago es historia, todavía es más música. Es la cuna del bolero, la trova y el son. No es extraño encontrar músicos tocando divinamente en cualquiera de sus calles.

En Santiago de Cuba hay mucho que ver y mucho que bailar. Por eso te aconsejamos que te quedes aquí dos o tres días al menos.

Algunos de sus edificios más emblemáticos son la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, el Parque Céspedes y el Ayuntamiento. Aunque hay plazas y calles dignas de ver por todas partes.

En tu experiencia santiaguera no dejes de alquilar uno de esos coches de otro siglo que has visto en las pelis para ir hasta Castillo del Morro en las afueras o a tomarte un ron y mover las caderas en la Casa de la Trova. 

Hasta aquí nuestra propuesta de ruta por Cuba en 10 días.

Como te decíamos al inicio, Cuba es inabarcable tanto por su extensión como por su magia. De hecho, es uno de los destinos que más adictos tiene.

Por eso es tan importante que no olvides tu cuaderno de viajes de Cuba para organizar tu estancia en la isla: lugares de interés, horarios, mejores alojamientos… y, por supuesto, tus pensamientos viajeros, el mejor recuerdo de un viaje.